viernes, 17 de abril de 2009

Etapa 13: Valença - Briaños. La etapa resumen


DATOS
Hora de salida: 10:06
Tiempo  total: 09:15
Km:  71.6
Tiempo pedaleando: 5:49
Velocidad media: 12.3
Velocidad máxima: 46.2

CRÓNICA

La etapa de hoy ha sido un compendio muy resumido de los ya más de 900 km de camino que llevamos. En un solo día hemos tenido lluvia, por supuesto, y sol como los primeros días. Hemos circulado por carreteras con mucho tráfico, por caminos frondosos y como no, por calzadas adoquinadas. Hemos cruzado pueblos desiertos y atravesado ciudades llenas de vida en la calle. Hemos vuelto a subir rampas imposibles y descensos de vértigo. Hemos atravesado zonas industriales muy alejadas de lo que un entorno idílico para un peregrino (porriño) y otros parajes de ensueño como la ribera del Louro. En definitiva, 900 km resumidos en apenas 70, todo concentrado y muy intenso.

Como siempre el día empezó diluviando así que alargamos el último desayuno portugués para, en una escampada, cruzar a España a través del último gran río que cruzaremos, el miño.

Después tui y a continuación, dos parajes antagónicos... Unas corredoiras impresionantes, donde a cada paso brotaba el agua, se oía el fluir de los regatos, los pájaros... Para luego adentrarse en el polígono de porriño, donde durante cerca de 6 km se circula entre coches y camiones en una frenética actividad.

A partir de ahí, he vivido las rías baixas como nunca antes las había vivido. Siempre las había cruzado por autopista o carretera, donde los desniveles son suavizados o eliminados... Pero hoy las he vivido desde dentro... Como lo viven los paisanos que viven y trabajan aquí. Las rías están separadas por auténticas murallas naturales. Montes de gran pendiente que se levantan de golpe a centenares de metros sobre el nivel del mar. Y hay que subirlos... Y también hay que bajarlos... Y esa experiencia de subir dándolo todo, y bajar con mucho cuidado por pendientes enormes, me ha permitido descubrir esa otra cara de las rías.

Pero realmente no llegamos a Galicia hasta que, poco antes de redondela, paramos a comer nuestra ración de pulpo y a tomar nuestra estrella Galicia... El bacalhau y la Sagres no están mal... Pero el producto nacional es incomparable.

Lo cierto es que nos tomamos la etapa con tanta calma que al final se nos hizo larguisuma la etapa... Y mucho más dura de lo previsto ya que además las piernas ya estaban bastante tocadas después del alto de Labruja. Incluso al pasar Pontevedra, donde teóricamente el terreno es más suave, sin hay que recorrer muchos caminos embarrados, muchas zonas de empuje, y muchas rampas duras.

Así, ya muy avanzada la tarde, llegamos a una nacional, la 550 en un punto muy familiar para mí... El muiño de baroña. Apenas hay que desviarse 300 metros del camino para visitar una cascada con molinos de agua rehabilitados para hostelería y degustar una cerveza y comer algo en un lugar único. Muy muy recomendable.

Después de hacer justamente esto, seguimos hasta el albergue, que está apenas a 2 km de allí... Y sorpresa, sólo quedaban 3 camas libres. Hay más de 20 personas aquí!!! Ya no sabía que era esto de dormir con gente... Pero lo estoy notando ahora mismo. Preveo que será una noche dura, porque la sinfonía de ronquidos es espectácular!

Ya que es el último día, compartimos el poco licor que quedaba con algunos de los peregrinos... Un padre y su hijo portugueses, 5 alicantinas y una méxicana, que ha preparado el camino al estilo de los del año pasado... Es decir, nada!!! Jejeje

Por cierto que nada más entrar en España, la señalización es mucho más escasa que desde Oporto... Aunque bastante intuitiva ya que no nos perdimos ni una sola vez.

REFLEXIÓN

Cuantas veces nos ha pasado que descubrimos algo nuevo, en un sitio por el que pasamos a diario y que lleva ahí toda la vida?
Cuantas veces, alguien de quien nos formamos una opinión, nos sorprende y descubrimos que la realidad es muy diferente a nuestra visión previa?

En muchas ocasiones la rutina de la vida diaria impide descubrir la realidad de las cosas que tenemos a nuestro alrededor. Basta con acercarse a ellas de forma diferente para llegar incluso a formarse una opinión totalmente difernte de la que se tenía con aterioridad.

MAÑANA

Mañana, como todos los últimos días será un día de sentimientos contradictorios, querré llegar y a la vez querré que no llegue el final del camino. Tendré ese regusto agridulce de las últimas etapas.
Pero ese día ha de llegar... Y ese día especial será mañana... Así que sólo me queda decir, ahora ya en gallego, boas noites et ultreia et suseia!

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me alegro que todo llegue a su buen termino, la entrada a Santiago como es costumbre seguro que la haceis llovindo, pero eso con la alegria y la tristeza no tiene importancia, y sobre todo con el reencuentro de la gente que te quiere.

Un abrazo fuerte para los dos.
(un beso para Monica)

Sebas y Toñi.

Miguel Daquinta dijo...

Enhorabuena! Por lo que sé, ya habéis llegado a Tierra Santa.

A recuperar fuerzas y rememorar los grandes momentos que a buen seguro habéis vivido.

Ahora a pensar la "caminata" del año próximo.

Nos vemos pronto!

calan dijo...

Enhorabuena por vuestro duro, durísimo Camino.

Gracias, como siempre, por compartirlo con todos. Ha sido un placer seguirlo, aunque sea a distancia.


Salud desde la ciudad de la Plaza Mayor inclinada para todos los lado. Ourense
Ignacio